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Los Alcaldes Recogieron el Guante
Los alcaldes recogieron el guante
Debut. A 15 días de haber asumido, las nuevas autoridades municipales ya recibieron centenares de reclamos Los primeros seis meses serán de "continuidad", por la falta de presupuesto propio
R. ROSSELLO / A. LÓPEZ REILLY
Indigencia, viviendas deshabitadas, basurales y falta de iluminación. Los ocho alcaldes recién asumieron y ya se están dando un baño de realidad con los problemas que aquejan a los montevideanos. Los primeros tiempos serán de aprendizaje.
El primer gran desafío que tienen por delante los ocho alcaldes de Montevideo es demostrarle a la población que la creación de un tercer nivel de gobierno municipal no aumentará la burocracia.
En principio, las nuevas autoridades arrancaron con un bajísimo apoyo de la ciudadanía, que le dio la espalda en las urnas a una reforma que la oposición consideró fue votada "entre gallos y medianoche".
Pero los flamantes alcaldes de la capital ya están detrás de sus escritorios, manteniendo una infinidad de reuniones y trabajando prácticamente sin horario. En sus propios despachos hay todo tipo de carencias, desde computadoras a cortinas, o sillas. Pero todos coinciden en que están comenzando a transitar por un lento proceso de cambio: un camino de aprendizaje, al fin y al cabo.
Durante los primeros seis meses se manejarán con el presupuesto previsto por la pasada administración para la descentralización de la ciudad.
Por tanto, deberán ingeniárselas para maximizar todos los recursos disponibles y para atender territorios que tienen todo tipo de reclamos y necesidades, y que desbordan ampliamente, en todos los casos, las jurisdicciones de los centros comunales zonales.
El alcalde Carlos Varela todavía no tiene una computadora en su oficina y utiliza su laptop personal. Admite que el Municipio B, ubicado en Eduardo Víctor Haedo 2147, en la esquina del Parque Seregni, "se encuentra un poco lejos de la Ciudad Vieja y el Centro", dos de los principales barrios de su jurisdicción, pero esto ocurre en general con el resto de los nuevos gobiernos instalados.
"Nos preocupa mucho la situación de calle y la cantidad de casas tapiadas o deshabitadas que tenemos", confiesa Varela en entrevista con El País.
El Municipio B tiene bajo su égida al CCZ N° 1 y al CCZ N° 2, abarcando barrios como Ciudad Vieja, Centro, Cordón, Barrio Sur, Palermo, Parque Rodó y Aguada.
Es un territorio densamente poblado, con unos 250.000 habitantes y otra cifra similar de personas que circulan por él habitualmente. "Entre otras cosas, tenemos al puerto en la Ciudad Vieja, por donde ingresan miles de turistas, además de la principal avenida, sanatorios, ministerios y empresas públicas", enumera el alcalde.
Solamente en la Zona N° 1 hay 24.900 viviendas y 20.000 hogares, lo cual evidencia que hay casi 5.000 propiedades deshabitadas. Y la Zona N° 2, es aún más grande.
El Municipio B se encuentra junto a la Casa del Vecino y próximamente tendrá en un padrón lindero a la Biblioteca "Morosoli".
Otros reclamos que se han recibido en los municipios son los que tienen que ver con la acumulación de basura y la falta de luz en distintas zonas. Pero las oficinas, como los equipos de trabajo, recién se están comenzando a integrar.
"Hay cinco funcionarios que pasaron del gobierno central al Municipio B, más una cuadrilla polifuncional de 10 personas -que ya estaba en la región- en la que hay herreros, un albañil y un sanitario, entre otros oficios. Y contamos con toda la gente de los servicios de los centros comunales 1 y 2, que ahora están a la orden del municipio. Lo que tenemos que ver ahora es cómo potenciamos los servicios, porque tenemos dos equipos de inspección, dos de área social, dos de arquitectos, etc. Tenemos que ver cómo la debilidad de uno la transformamos en fortaleza para el otro", explicó el alcalde Varela.
EN EL ARRANQUE. La actividad en el segundo piso de la casona sobre Luis Alberto de Herrera casi Millán es intensa. El edificio pertenece al CCZ 15, pero desde este mes es también sede del Concejo Municipal del Municipio C de Montevideo.
En los pasillos todavía están las nuevas sillas sin desempacar, la mesa desarmada de la sala de sesiones, y los técnicos trabajan en la conexión de las computadoras. Los despachos del flamante Concejo Municipal están a los fondos del edificio, en un ala acondicionada para sus nuevas funciones.
La alcaldesa Myriam Rodríguez está reunida con un grupo de funcionarios del CCZ. El Concejo ha tenido ya dos sesiones cuyo resultado fue, ni más ni menos, que el plan de gobierno resumido en un documento titulado "Líneas Estratégicas 2011-2015", que a fin de mes será sometido a un Cabildo Abierto.
El Municipio C abarca una vasta zona que contiene El Prado, el Parque Posadas, el barrio Larrañaga, Reducto, parte de La Aguada hasta los alrededores del Palacio Legislativo. Se estima que esa circunscripción tiene 155.000 habitantes.
"Hace pocos días participé en una reunión con alrededor de cincuenta vecinos del barrio Larrañaga, en respuesta a una invitación. Por ahora estamos yendo a los sitios donde los concejos vecinales u organizaciones nos llaman, respondiendo un poco a demanda, pero pensamos diseñar un plan de visitas para los próximos meses", explica la alcaldesa.
El Concejo Municipal tiene una clara mayoría oficialista: cuatro de sus miembros son del Frente Amplio y el quinto pertenece al Partido Nacional.
"Ser la mayoría no quiere decir que te saquen los problemas de encima. Nosotros nos marcamos como línea el tratar de tomar decisiones por unanimidad, siempre estar dispuestos a discutir y, realmente, nos encontramos con que el concejal del Partido Nacional es una persona muy abierta con la que se puede trabajar muy bien", asegura Rodríguez.
En otros casos sin embargo, como el Municipio CH (La Blanqueada, Parque Batlle, Villa Dolores, Punta Carretas, parte del Parque Rodó, Villa Biarritz, Pocitos y Buceo), el Frente Amplio es minoría en el Concejo.
Como forma de equilibrar la dinámica de trabajo en el Concejo C, que encabeza Rodríguez, se decidió que los suplentes participaran con voz, no con voto, en las sesiones ordinarias. "Creemos que es una buena forma de que todos vayamos aprendiendo, porque en definitiva esto es algo nuevo para todos", señala la alcaldesa.
Para el tercer municipio de Montevideo el peso de los espacios públicos es gravitante, basta pensar en la importancia de una zona como El Prado. Sin embargo una de las primeras preocupaciones que el Concejo tomó fue la de conocer la realidad de los parques, plazas y plazoletas de la circunscripción. "Estamos haciendo un relevamiento, diurno y nocturno, de los espacios públicos para conocer los niveles de ocupación que tienen, sobre todo por parte de personas en situación de calle", explica Rodríguez.
"Lo que pretendemos es que esos espacios sean ganados para los vecinos, todos tienen derecho a disfrutar de sus plazas aunque sea para tomar el sol", apunta.
En 30 días el informe estará completo y en base a ese relevamiento el municipio hará las coordinaciones con INAU y el Ministerio de Desarrollo Social (Mides).
El otro tema prioritario es la limpieza. "Por ahora sólo nos hemos ocupado del tema barrido, porque la Intendencia va a anunciar un plan global que todavía no conocemos", explica Rodríguez, haciendo referencia al "plan de impacto" anunciado por la intendenta Ana Olivera.
SIN HORARIO. La alcaldesa del Municipio D, Sandra Nedov, asegura que viene haciendo largas jornadas de trabajo desde antes de asumir. "Mis jornadas son bastante largas, empiezo a las 8 y termino a las 23 cuando tengo reuniones con vecinos", dice sin perder el entusiasmo ni por un momento.
Además de su rutina de trabajo diario, la titular del Concejo está realizando un curso impartido por la Intendencia sobre administración de recursos humanos, compras y otras materias relacionadas con el ejercicio de un gobierno local.
La quinta alcaldía de la capital abarca también una porción considerable de terreno y de población: se estima en unos 190.000 habitantes. "Cuando me preguntan yo siempre digo, para que no se enoje nadie, que nuestro municipio va de Toledo Chico a la Unión, y del Cerrito a Villa Española, con todo lo que queda en el medio", dice Nedov.
Sus oficinas funcionan a los fondos del CCZ 11, un prolijo edificio sobre la avenida General Flores casi Bagé, que los funcionarios municipales están acondicionando para que se instale allí el Concejo Municipal. "Esperamos que el lunes ya esté todo en condiciones para ocupar esa parte del local", dice la alcaldesa. De todos modos el órgano de gobierno ya sesionó dos veces, la última vez fue el miércoles pasado cuando se reunieron con los integrantes de cuatro concejos vecinales. "Nuestra idea era presentarles a ellos lo que serán nuestros lineamientos estratégicos, queremos que los vean con tiempo porque de eso va a depender el presupuesto", dice Nedov.
La alcaldesa percibe que la toma de decisiones en una zona tan peculiar debe requerir más tiempo e instancias intermedias antes de llegar a las decisiones. El municipio tiene áreas netamente rurales, como Toledo Chico en los límites con Canelones, a zonas comerciales por excelencia como la Unión, pasando por áreas de asentamientos irregulares y barrios peculiares como el 40 Semanas. "Somos más partidarios de ir haciendo asambleas barriales hasta llegar a la instancia del Cabildo Abierto", argumenta.
Tal vez debido a su pasado como activa militante sindical y más recientemente como concejal vecinal, Nedov tiene una idea muy definida del tercer nivel de gobierno: "nosotros nos vamos a encargar de la escala barrial de la Intendencia".
Al igual que lo que ocurre en el tercer municipio capitalino, el Concejo Municipal tiene una composición de cuatro miembros del Frente Amplio y uno del Partido Nacional. Y también al igual que esa demarcación, el Concejo del Municipio D resolvió funcionar con los suplentes, con voz y sin voto.
Nedov confía en la dinámica de ese organismo. Y cree que el verdadero desafío pasa por concretar la participación de los vecinos en proyectos locales. "Es la parte más difícil. Por lo general, al que le interesa el baby fútbol va sólo al club, otros van sólo a la iglesia, y hay muchos que no saben lo que es un concejal o un municipio. Esto ya se vio cuando se votó el presupuesto participativo, no fue todo el mundo. Lo mismo pasaría si las elecciones no fueran obligatorias", opinó.
LAS AUTORIDADES DEL TERCER NIVEL DE GOBIERNO MUNICIPAL
MUNICIPIO D
Gral. Flores 4694, esq. bagé
Alcaldesa Sandra Nedov
Socia fundadora y luego presidenta de la cooperativa Covitrivic, donde reside. Fue secretaria de la Junta Local 11 hasta 2010.
MUNICIPIO A
C. M. Ramírez esq. Rivera Indarte
Alcalde Gabriel Otero
Militante desde 1989 del MPP. Fue varios años dirigente sindical y presidente de la Central de Cooperativas del Taxímetro.
MUNICIPIO E
ESTADIO CHARRÚA, AV. BOLIVIA S/N
Alcaldesa Susana Camarán
Educadora preescolar. Ocupa el lugar de Venancio Abella, quien fue obligado a renunciar por haber sido procesado en 2002.
MUNICIPIO B
E. Víctor Haedo 2147 ESQ. Requena
Alcalde Carlos Varela
Fue director de Promoción Económica de la Intendencia. Ejerce la docencia en Derecho y Relaciones Internacionales.
MUNICIPIO F
8 DE OCTUBRE 4700, ESQ. M. SASTRE
Alcalde Francisco Fleitas
Trabajador de la industria de la construcción y dirigente del Sindicato de la Industria del Cuero. Está casado y tiene tres hijos.
MUNICIPIO C
lUIS a. DE HERRERA 4547
Alcaldesa Myriam Rodríguez
Fue directora de Descentralización de la Intendencia hasta el fin de la pasada administración y de RR.HH. de 2005 a 2007.
MUNICIPIO G
CNO. CASTRO Y MARÍA ORTICOCHEA
Alcalde Gastón Silva
Este mes abandonó su banca de edil, para la que fue electo por la Lista 90. Presidente de la Junta Departamental de 2008 a 2009.
MUNICIPIO CH
BRITO DEL PINO 1590
Alcalde Luis Luján
Edil en los períodos 2000-2005 y 2005-2010. Formó parte de las filas del Espacio 609 y actualmente milita en la CAP-L.
Qué pueden hacer y qué no
En líneas generales, los municipios tienen bajo su jurisdicción los temas de alcance barrial y están subordinados a la administración central en asuntos departamentales.
Aún estando subordinados, son órganos políticos y ejecutivos, pero que no sustituyen a los centros comunales a los efectos de las denuncias o planteos que puedan hacer los vecinos. "En un trámite como una queja por una luz apagada, el vecino debe ir al comunal. El reclamo no tiene que pasar por acá, porque eso sería burocratizar el sistema", explicó el alcalde Varela.
"Si el reclamo del vecino es por una falta de tendido eléctrico en determinada zona, hay que hacer obra nueva y eso hay que visualizarlo. La obra hay que planificarla y presupuestarla. Nuestra zona tiene la particularidad de tener muchas áreas compartidas (con el gobierno departamental). Las avenidas, los bulevares, las áreas verdes mayores a 10.000 metros cuadrados quedan en la centralidad. La plaza Seregni por ejemplo queda en la centralidad", ejemplificó.
Otra característica de la reforma es que ahora el vecino podrá plantear un reclamo ante cualquier oficina municipal descentralizada, incluso fuera de su barrio. No se le ofrecerá una solución allí al problema, pero se le dará traslado al comunal o al municipio correspondiente.
A diferencia de los CCZ, los gobiernos municipales tendrán autonomía para ordenar gastos e inversiones, de acuerdo a lo establecido en el presupuesto quinquenal y el plan financiero.
Serán también atribuciones de los gobiernos municipales elaborar anteproyectos de decretos y resoluciones, los que serán propuestos la intendenta para su consideración a los efectos de que, si correspondiera, los derive a la Junta Departamental.
Los alcaldes también deben supervisar las oficinas de su dependencia y ejercer la potestad disciplinaria sobre sus funcionarios, con los mismos derechos y obligaciones de un director general de la Intendencia. Los salarios de los alcaldes son similares a los de los directores municipales de departamento: unos $ 80.000, más partidas especiales para permitir el funcionamiento de sus secretarías. Los cuatro concejales que completan el municipio son honorarios.
El País Digital
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